Todas las historias tienen un final y no es feliz; quizá me equivoqué pensando en un futuro junto a ti. Y sé que no se puede cambiar nada ya, paso de rayadas porque ni siquiera ya me quedan ganas. Tengo una espina clavada que se agota como la tinta, no todo es tan bonito como te lo pintan. Y lo siento, sé que no soy perfecto pero, juro no volver nunca jamás a mirar hacia atrás. Nadie puede calmar este odio que encierro dentro, mi cuerpo está por explotar, murió y quedó sin sentimientos. Miento al decir que soy otro pero vivo en el abismo,
no es que mi corazón esté roto, es que ya no es el mismo.
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