
- ¡Estoy aquí! ya sé que no puedo llamarte sin más.
- No, no puedes
- Lo sé, te hice daño y lo siento. No sé por qué desperdicié tanto tiempo fingiendo que no me importabas, supongo que... no quería sentir esto. Duele... pero te quiero, estoy enamorada de ti y me da igual que tú creas que ya es tarde pero te lo tengo que decir... di algo por favor.
- Espera... ¡Quiero que sepas que si te acercas más a mí ya nunca te dejaré ir!
No hay comentarios:
Publicar un comentario